Considerar:

La obstinación es quizá la única cualidad humana valiosa no sólo en la profesión policial sino al menos en todas las que tienen que ver con el concepto de verdad.

Michel Houellebecq (1958-?) Poeta, novelista y ensayista francés

Terrazas del Rodeo

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Libros
  1. Esther Bendahan (Tetuán, 1964) acaba de publicar la novela 'Escucha el silencio' (ed. Nagrela), en la que recorre una pequeña gran historia familiar que empieza en Uruguay y pasa por Madrid y una aldea gallega. Precisamente allí, la protagonista, que padece sordera, busca el testimonio de quienes salvaron a su abuela cuando huía del Holocausto. Un crimen y el ambiente asfixiante de una localidad perdida y encerrada en un misterio son el condimento de esta narración que también reflexiona sobre el valor del testimonio de quienes hicieron el bien en tiempos difíciles. -¿Por qué eligió la historia de salvación de un superviviente de la Shoah? -He conocido a supervivientes que han venido a España para testimoniar. Annette Cabelli relató la... Ver Más
  2. Patrick Ness sintió un impulso irrefrenable cuando vio la foto del cuerpo del pequeño Aylan en una playa turca, que se hizo viral como símbolo del sufrimiento de los refugiados sirios. «Fue un momento de desesperación. Una forma de canalizar el deseo colectivo de hacer algo», explica a ABC. Su llamada a través de las redes sociales causó un movimiento en cadena, con múltiples autores igualando las donaciones iniciales y logró recaudar más de un millón de dólares en apoyo a un pueblo que hoy celebra el fin de su guerra civil. Una muestra más de que las historias –ya sean literarias o reales– pueden movilizar a las personas hacia la acción. Ese compromiso social ha estado presente desde la... Ver Más
  3. «La noche es una copa de mal» (César Vallejo). I. Empezó, entonces, un recorrido absurdo por el perímetro de la villa. Aprovechando esa especie de inmunidad que les confería la noche, apedrearon las casas solariegas, invadieron los jardines públicos, atacaron a los pájaros en sus nidos, a los gatos en los tejados. La imaginación de Lucho era inagotable y su ardor no conocía fatiga. Teodoro lo seguía, sintiendo decrecer su entusiasmo con el espesor de la noche. Al cabo de un tiempo, se encontraron caminando por los terrenos baldíos de una antigua hacienda que la ciudad había empezado lentamente a devorar. Lucho, a la cabeza, saltaba las acequias ayudándose con una vara de laurel. El cielo había perdido su resplandor... Ver Más
  4. Julián Quirós (Guareña, Badajoz, 1969) no es nostálgico, pero no deja de hacer memoria con su poesía. Primero de forma íntima en 'Pérdidas y ganancias', su debut, y ahora generacionalmente en 'Antes de que Google nos Alcance' (Reino de Cordelia), que viene a ser la crónica de un mundo analógico en el que los niños no tenían pantallas sino paladas de tiempo libre y los adultos días largos y cansinos en los que casi nunca pasaba nada; un mundo, en fin, que está más lejos en la memoria que en el tiempo: no fue hace tanto, insiste el poeta. «La digitalización no ha sido un cambio para las siguientes generaciones. Nuestra misma generación ha experimentada esa transformación. Ha sido como... Ver Más
  5. El accidente nuclear de Chernóbil fue, a decir de muchos expertos, la mayor catástrofe ecológica en la historia de la humanidad. La ola radiactiva afectó a 13 países y contaminó un área de 160.000 kilómetros cuadrados. Todo sucedió el 25 de abril de 1986 cuando uno de los cuatro reactores de la central nuclear voló por los aires tras un sobrecalentamiento del núcleo mientras se realizaban unas pruebas. Prípiat , la ciudad donde residían los trabajadores de la instalación, fue evacuada al día siguiente. Han transcurrido 38 años y Prípiat sigue siendo una población fantasma, totalmente deshabitada, con niveles de radiación que no volverán a ser normales en miles de años. Tenía 50.000 habitantes en el momento de ser abandonada por decisión del Politburó soviético, cuyo secretario general era Mijail Gorbachov . El líder comunista tardó más de 24 horas en reaccionar porque las informaciones que le llegaron inicialmente minimizaban el impacto del accidente. Prípiat fue planificada en 1970 por los arquitectos soviéticos que querían construir una ciudad modelo a la sombra de la central. Estaba a 2,7 kilómetros de Chernóbil, en el norte de Ucrani a, muy cerca de la frontera con Bielorrusia . La media de sus habitantes era de 30 años en 1975 cuando llegaron a nacer casi 1.000 niños. Hoy es imposible acceder a Prípiat porque el Ejército ha establecido un cordón de seguridad de 30 kilómetros de radio. Sólo los expertos y algunos periodistas pueden visitar la zona cero del desastre. Lo que queda es el esqueleto de una ciudad que tuvo que ser abandonada precipitadamente. A última hora de la tarde del 26 de abril, al día siguiente del accidente, ya no quedaba nadie. Varios miles de autobuses evacuaron a toda la población en unas horas. Los vecinos de Prípiat y los pueblos de sus alrededores, en total, unas 120.000 personas, tuvieron que dejar el lugar . Aunque hay signos de vandalización por algunos ladrones que lograron eludir el cerco, todavía es posible entrar a las viviendas que conservan los muebles y los enseres de sus antiguos pobladores. Los edificios ya no tienen cristales, las lluvias han derribado los tejados, las calles están llenas de socavones, el tiempo ha hecho estragos en sus infraestructuras. Las imágenes muestran su antiguo y grandioso palacio de Cultura, su piscina climatizada, el restaurante, un polideportivo, las escuelas, los edificios administrativos y su hospital, donde fueron llevados cientos de los afectados. Cerca de 50 trabajadores de la central murieron por el impacto de la radiación en los siguientes días. No es posible todavía hacer un balance exacto de las víctimas, pero se calcula que en las siguientes dos décadas pudieron fallecer varios miles a causa de cánceres provocados por la radiación. Los niveles de radiactividad durante el accidente superaron en 500 veces a los de la bomba atómica de Hiroshima, lo que da idea de la devastación. Las autoridades soviéticas construyeron un sarcófago para sellar la central, que, años después, fue reforzado. La vida ha vuelto progresivamente a Prípiat, donde perros, zorros y algunos animales salvajes sobreviven sin la presencia humana. Todavía florecen las rosas plantadas hace medio siglo, que fueron el emblema de la ciudad. Sus parques, invadidos por la vegetación, evocan lo que fue aquella ciudad que simbolizó el progreso industrial del comunismo soviético en los años 70, que se jactaba de disponer de la tecnología nuclear más avanzada del mundo. Prípiat es hoy una advertencia silenciosa de los riesgos de un progreso sin control .
  6. Fue un día en la FIL para hablar de exilios, de distancias, de literaturas nacidas lejos del hogar, de huecos por los que entra el invierno. Sergio Ramírez recibió el doctorado honoris causa de la Universidad de Guadalajara, y empezó su discurso acordándose de las llaves de su casa de Managua, de la que se fue hace tres años empujado por el dictador Ortega , que le quitó la nacionalidad nicaragüense. Se las encontró, las llaves, hace poco en el forro de una maleta. «Recordé entonces, al tenerlas, a los judíos de Sefarad desterrados en 1492 de España por decreto de los reyes católicos, y cuyos descendientes, siglos después, conservan en Tesalónica, en Estambul, en Jerusalén, las llaves de las casas de sus antepasados», dijo. Y relató una historia que contó Manuel Vicent hace una década, la de un comerciante de ámbar que viajaba por España con la llave de una puerta que solo existía en sus sueños. Un día, entre los cachivaches de un gitano de Plasencia, encontró una cerradura herrumbrosa del siglo XV en la que su llave encajaba y funcionaba a la perfección. «Así es como se abre y se cierra el destino», sentenció. El exilio suspende el tiempo, deja abierta no una puerta pero sí una esperanza. En 'Meditaciones sobre la duración del exilio', Bertolt Brecht escribió: «No pongas ningún clavo en la pared, / tira sobre una silla tu chaqueta. / ¿Vale la pena preocuparse para cuatro días? / Mañana volverás». Gioconda Belli , que participó en una mesa llamada Un boleto solo de ida , aseguró que ella sí tenía un billete de vuelta, pero no pudo usarlo, porque cuando le tocaba regresar ya estaban represaliando a gente como ella. Ahora no tiene pasaporte nicaragüense. Y sin embargo… «Nicaragua es un país tan chiquito que es portátil. A mí nunca nadie podrá arrancármela del corazón». Karina Sainz Borgo nació en 1982 en Venezuela, que entonces era un país democrático y rico al que muchos iban a buscarse una vida. «Crecí en una visión festiva y hermosa de la inmigración», contó. Luego vivió el desmoronamiento de todo, la violencia, la muerte no como excepción sino como algo familiar. Se fue en 2006, como tantos otros. Hace doce años que no regresa. «Mi boleto de ida lo tomé de forma inconsciente, para poner distancia. Ahora mi país me duele con la misma intensidad que con la que lo utilizo. Soy incapaz de relacionarme con él de una manera saludable. Y para eso está la literatura, para los problemas. Yo ya solo vuelvo a Venezuela en mis pesadillas y en mis libros», sentenció. Y mencionó a Kurkov : «En Rusia lo detestan y en Ucrania lo miran mal porque no es lo suficientemente patriota». Hay una larga lista de escritores desplazados, transterrados, que tal vez formen una patria imaginaria y dolorosa. Y podría empezar, por qué no, por Ovidio , a quien el emperador Augusto envió a Tomis, «allá donde ninguna otra cosa hay, sino frío, enemigos y agua de mar que se congela en apretado hielo». No corrió mejor suerte Séneca , desterrado por Claudio a Córcega, un lugar en el que por entonces solo había dos cosas: el exilio y un exiliado. Sergio Ramírez trazó los contornos de esa nación imposible de ilustres desgraciados que sufrieron los embates del poder: Haroldo Conti, Rodolfo Walsh, Rómulo Gallegos, Juan Bosch, Augusto Monterroso, Luis Cardoza y Aragón, Roa Bastos, Juan Carlos Onetti, Mario Benedetti, Juan Gelman, Juan Ramón Jiménez, María Zambrano, Pedro Salinas, Rosa Chacel, Luis Cernuda... «Yo pertenezco a esa larga tradición de quienes pagan un precio por sus palabras, dos veces bajo orden de prisión, y dos veces obligado al exilio, primero en mi juventud por una dictadura familiar, y tantos años después, por otra dictadura familiar. Pero hay algo de lo que nunca nadie podrá exiliarme, y es de mi propia lengua», aseveró. «Todos aquí somos migrantes», aventuró Karina Sainz Borgo: «El ser humano tiene una capacidad asombrosa de trazar fronteras: somos migrantes en nuestra propia ciudad, en nuestra propia familia, en nuestro trabajo. A un poeta que se vuelve novelista le preguntarán: ¿y tú qué haces aquí? Siempre tienes que pasar por una especie de arrabal en el que alguien te tiene que dar un pasaporte: no eres lo suficientemente correcto, no eres lo suficientemente de izquierdas, no eres lo suficientemente socialdemócrata, no eres lo suficientemente feminista, no eres lo suficientemente alto... Todo esto produce una sensación de errancia y deserción que a mí me está machacando». Y se despidió citando a Borges : «Me legaron valor. No fui valiente». Ay.
  7. Las asociaciones de editoriales universitarias iberoamericanas han firmado el 'Acuerdo de Guadalajara' en el marco del XI Foro Internacional de Edición Universitaria y Académica, celebrado en FIL 2024, que recoge un compromiso con la ciencia iberoamericana y con el español y el portugués como lenguas científicas. El acto de firma del acuerdo ha sido presidido por las representantes de UNE (María Isabel Cabrera), EULAC (Lía Castillo), ALTEXTO (Martha Esparza) y Editorial UDG (Sayri Karp), en presencia del embajador de España en México, Juan Duarte, del director general del Español en el Mundo del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación del Gobierno de España, Guillermo Escribano, y del coordinador general de Expositores y profesionales de la FIL, Armando Montes de Santiago. Este es el texto íntegro del acuerdo: ACUERDO DE GUADALAJARA En el marco del XI Foro Internacional de Edición Universitaria y Académica, realizado en el contexto de la FIL Guadalajara 2024, las asociaciones de editoriales universitarias iberoamericanas, representadas por ABEU, Brasil; ASEUC, Colombia; Altexto, México; APEES, Portugal; EDUPUC, Costa Rica; Ex Libris, El Salvador, EUPerú, Perú; REDUCH, Chile; REUN y REUP, Argentina; AUSJAL, la red de universidades jesuitas, CLACSO, UNE, España, y la red de asociaciones latinoamericana, EULAC, que de manera conjunta integran más de quinientas editoriales de instituciones de educación superior y centros de investigación del espacio iberoamericano, con el ánimo de garantizar la difusión universal de los contenidos que produce la ciencia y buscando alinearse con la declaración de la VI Reunión de Ministras y Ministros y Altas autoridades iberoamericanas de Ciencia, Tecnología e Innovación celebrada en Valencia el 10 de octubre de 2024, ACORDAMOS •⁠ ⁠Trabajar conjuntamente para reconocer e impulsar el español y el portugués como lenguas científicas. • Propiciar una circulación efectiva de los contenidos y las publicaciones académicas y/o científicas en estos idiomas en el espacio iberoamericano con intención global. •⁠ ⁠Coordinar esfuerzos para diseñar estrategias y aplicar herramientas de edición y difusión en abierto de los contenidos y las publicaciones académicas y/o científicas a través de sistemas y plataformas conjuntas para fortalecer su circulación. •⁠ ⁠Potenciar y fomentar alianzas entre las editoriales para innovar e implementar los recursos y las tecnologías que faciliten el quehacer editorial y el uso responsable y ético de la inteligencia artificial en la producción y difusión de los contenidos y las publicaciones universitarias. • Contribuir al establecimiento de un marco iberoamericano de colaboración para la construcción de un modelo que sirva de punto de partida para un corpus del lenguaje científico y académico en español y portugués. •⁠ ⁠Colaborar y establecer vínculos con los principales agentes encargados de la evaluación de la ciencia aportando herramientas que permitan el reconocimiento de la calidad de las ediciones académicas y/o científicas. Y velar permanentemente por el rigor y la excelencia de nuestros procesos y nuestras publicaciones. •⁠ ⁠Trabajar de manera conjunta con la Secretaría General Iberoamericana para impulsar la futura creación de una Red Iberoamericana de Editoriales Universitarias y Científicas. CIENCIA PARA TODOS Firman: Milagros Aguirre Andrade, REUDE, Educador Norma Hernández Escobar, Libris, El Salvador Martha Esparza Ramírez, Altexto, Mexico María Isabel Cabrera García, UNE, España Gustavo Solorzano Alfaro, EDUPUC, Costa Rica Marco Giraldo Barreto, ASEUC, Colombia Lizbeth Alvarado Campos, EUPERU, Perú Rita Virginia Argollo, ABEU, Brasil Delfim Leão, APEES, Portugal (por mandato de Joao Caetano) María Fernanda Pampín, CLACSO Lía Castillo Meneses, EULAC Inés Brandan, REUP, Argentina Miriam Margarita Ortega Torres, AUSJAL Patricia Corona, REDUCH, Chile Ignacio Artola, REUN, Argentina (Secretaría y relatoría) Sayri Karp Mitastein Juan Felipe Córdoba Restrepo
  8. Lleva unas gafas de sol de aviador, una gorra negra, una camiseta de Misfits: Antonio Ortuño (Guadalajara, México, 1976) habla a toda velocidad, como si quisiera atrapar al niño que fue mientras recuerda: «Yo he venido a todas las ferias; cuando comenzó yo estaba en cuarto de educación primaria [once años], y en mi escuela había mucho interés por los eventos externos, metían a los niños en los concursos de matemáticas de la zona, en concursos de conocimiento, en cualquier lado, así que nos llevaron a la primera FIL. Muy poco tiempo después uno de mis hermanos entró a trabajar a la universidad y en un área en el que colaboraban con la organización de la feria del libro, entonces... Ver Más
  9. Bruno Pardo Porto con su obra 'El rumor de las cenizas' ha sido el ganador del XXXI premio de Poesía Cáceres Patrimonio de la Humanidad , dotado con 6.000 euros y la publicación de la obra. El fallo del jurado se ha dado a conocer en un acto que ha contado con la presencia del alcalde Rafa Mateos y de miembros del jurado. «' El rumor de las cenizas ' es un libro maduro, donde se logra una perfecta adecuación entre intensidad e imagen, entre emoción y estilo. Trata los temas de siempre pero con una voz con personalidad», ha valorado el jurado sobre la obra premiada. Mateos ha destacado que «es un certamen de referencia y que año a año tiene una mayor proyección. Prueba de ello es que se han presentado un total de 821 obras procedentes de Estados Unidos, Hispanoamérica y de toda España». «La calidad viene de la mano de un jurado muy exigente», ha incidido el alcalde, «escrupuloso, minucioso, detallista y con gran intuición, como el capitaneado en esta edición por una de las mejores voces de la literatura española como la Luis Alberto de Cuenca, premio Nacional de Literatura, que no ha podido asistir y al que le deseo una pronta recuperación». «Le acompañan plumas no menos destacadas, por supuesto, siendo vocales Diego Doncel , premio Adonáis y Loewe de Poesía; Irene Sánchez Carrón , premio Adonáis; Pilar Galán, coordinadora del Aula literaria José María Valverde y autora de numerosos libros; Teófilo González Porras , catedrático de Literatura, como vocal y secretario del jurado; y el concejal de Cultura Jorge Suárez , con voz pero sin voto», ha detallado. Bruno Pardo Porto nació en O Grove en 1992. Es graduado en Humanidades y Comunicación Audiovisual, y máster en Periodismo y Comunicación Digital. Recibió el premio San Isidoro de Sevilla de Iniciación a la Investigación por su trabajo sobre la relación entre las series de televisión y la literatura. Desde hace ocho años trabaja como redactor de la sección de cultura del diario ABC, donde es responsable del área de literatura y realiza reportajes, crónicas y entrevistas. También es columnista del mismo periódico. En 2023 fue finalista del premio Adonáis, y sus poemas han aparecido en revistas como 'Piedra de molino'.
  10. Alessandro Baricco (Turín, 1958) saluda y sonríe bajo un sombrero negro. Lleva las manos protegidas por unos mitones claros que lo acompañan desde hace años. Hay algo frágil y elegante en sus gestos, en su dicción suave, algo que también está en su prosa: un funambulismo muy concreto y delicado que une dos mundos como se unen dos cuerpos. Baricco, que está de vuelta de una leucemia que lo llevó dos veces al quirófano, empezó a escribir su nuevo libro sin saber si iba a publicarlo. «Pero es muy triste escribir solo para uno mismo», dice el hombre, ya con la edición española de 'Abel' (Anagrama) entre las manos. Es su primera novela en nueve años, y es un wéstern... Ver Más